China ajusta controles de exportación

El comercio internacional con China está por enfrentar un cambio importante. A partir del 1 de octubre de 2025, entrará en vigor una normativa que transformará la manera en que las empresas exportan mercancías desde el país.

China ajusta controles de exportación

El comercio internacional con China está por enfrentar un cambio importante. A partir del 1 de octubre de 2025, entrará en vigor una normativa que transformará la manera en que las empresas exportan mercancías desde el país. El tema central son las licencias de exportación, requisito obligatorio para todo exportador que desee enviar sus productos al extranjero.

¿Qué es una licencia de exportación en China?

La licencia de exportación es un documento oficial que autoriza a una empresa a vender y enviar mercancías fuera de China.

Hasta ahora, muchas compañías que no contaban con este permiso utilizaban un sistema alternativo conocido como “servicio de licencia de exportación”. Bajo esta práctica, un agente de aduanas declaraba la carga usando los datos de otra empresa que sí disponía de la licencia. Si bien fue un mecanismo muy común, siempre estuvo en un área gris legal.

¿Por qué esta práctica se considera un área gris?

Aunque resultaba práctico para evitar los trámites de registro como exportador, este modelo generaba dos problemas que preocupaban a las autoridades chinas:

  1. Evasión fiscal: al declarar valores más bajos en las mercancías, algunos agentes reducían el pago de impuestos.

  2. Abuso de subsidios: en ciertos casos, se manipulaban códigos HS o se usaban empresas ficticias para acceder a devoluciones de impuestos más altas de las que correspondían.

Ambas prácticas afectaban directamente los ingresos fiscales y los programas de apoyo del gobierno.

Los cambios que entran en vigor el 1 de octubre de 2025

La nueva política busca eliminar definitivamente estas prácticas y garantizar mayor transparencia en las operaciones. Las principales medidas son:

  • Todas las exportaciones deberán declararse con los datos reales del exportador.

  • Será obligatorio presentar documentación completa y válida: lista de empaque, factura comercial, certificado de devolución de impuestos y certificado de compra de divisas.

  • El uso de licencias “prestadas” quedará prohibido.

  • Se impondrán multas severas y posibles suspensiones de operaciones a agentes de aduanas, freight forwarders y exportadores que no cumplan.

¿Qué deben hacer las empresas exportadoras?

El camino correcto será registrarse oficialmente como exportador y obtener su propia licencia. Aunque el proceso implique mayor complejidad administrativa y costos adicionales, garantiza operar dentro del marco legal y sin riesgos futuros.

Para los importadores que trabajan con proveedores en China, será clave verificar que estos cuenten con licencias válidas y que toda la documentación se gestione de manera transparente.

Conclusión

La implementación de esta norma confirma una tendencia global: los gobiernos buscan más trazabilidad, transparencia y control en el comercio internacional.

Para las empresas que importan desde China, adelantarse a esta regulación es una ventaja competitiva. Estar preparados hoy significa evitar riesgos mañana y asegurar que cada operación se realice bajo estándares formales y seguros.